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SCREAM 4

          Sidney vuelve a su pueblo después de 10 años. Superviviente de  los crímenes de Ghostface está dispuesta a rehacer  su vida. Pero en cuanto vuelve, los crímenes comienzan de nuevo.

          Scream 4 es una película bastante pensada y se podría decir que hasta cinéfila. El prologo, lo mejor, es muy inteligente, una sorprendente construcción metacinematográfica. Scream 4 no es, en sentido estricto una película de terror: es una película sobre el cine de terror. Deconstruye, analiza, crítica y reelabora los conceptos del género. Cita a decenas de películas del género. No tiene miedo de mezclar humor y terror, ni de hacer continuas referencias cinéfilas mientras avanza la acción.

          Un reparto femenino de lujo, carne fresca para el puñal de Ghostface, muere y se lo pasa bien, parodiando sus propias películas y clichés.

          Wes Craven denuncia los excesos tecnológicos, las redes sociales, la búsqueda de la fama (nueva chica, nueva franquicia) y construye asesinatos tan hábiles como el de la llamada de móvil.

          Los grandes aficionados al terror disfrutarán; el resto quizá no le vea la gracia.