aQuilo

SANTOS DE PANTALÓN CORTO

          ¿Es posible alcanzar la santidad de altar antes de los quince años? ¿Se puede canonizar  a alguien con menos de esa edad? Estas preguntas se las han hecho quienes debían estudiar los casos de muestras heroicas de santidad en personas de menos de esa edad. No abundan los casos de santos, salvo mártires, menores de 15 años. En la introducción del libro se aborda con rigor esta cuestión. Los casos que Paredes narra reflejan un grado heroico en la vivencia de las virtudes. El primero que trata es Domingo Savio, un chico que murió a los quince años. Nació en una familia italiana de escasos recursos a mediados del siglo XIX; fue educado bajo la tutela de San Juan Bosco; el relato de su vida es breve pero bien documentado. A su fragilidad física acompañó su fortaleza interior; murió por enfermedad a los quince años. El segundo caso, es de una chica chilena, Laura Vicuña. Su padre fue militar y tuvo que huir con su familia; ante el desamparo a su muerte la madre de Laura, Mercedes, para buscar sustento vive con un aventurero guapo, rico y pendenciero. Para evitarle la miseria moral del entorno, Mercedes envió a Laura y a su hermana a estudiar con las salesianas, recientemente instaladas en Chile. Cuando Laura comprende la situación moral en la que vive su madre, su comportamiento es heroico; siempre bajo la supervisión de su confesor. El tercer caso es más conocido: son los niños de Fátima a los que se les aparece la Virgen: Jacinta y Francisco que mueren pronto y Lucía que vivirá hasta los noventa años. Paredes aporta algunos datos poco conocidos, como la aparición del ángel a Lucia y a dos amigas antes de aparecerse a los tres primos. Son relatos que hacen reflexionar a quienes tienen encomendada la formación cristiana de niños y que muestran como la gracia supera barreras de edad; El buen o mal uso de la libertad, trae consigo consecuencias.