OCIO Y TIEMPO LIBRE: APRENDE A VIVIRLO
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- 15 Junio 2014
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Arvo
Los padres han de ayudar a organizar el tiempo libre de los hijos.
Nuestra vida es un ir y venir: salir de casa para ir al trabajo, preparar reuniones, exponer proyectos, hacer viajes de negocios… gran parte de nuestra vida la pasamos trabajando, haciendo lo que está mandado. Pasan los días, los meses y los años y cada vez anhelamos más tener tiempo libre. Y paradójicamente, cuando disponemos de él nos cuesta saber qué hacer…
DISFRUTAR DEL TIEMPO LIBRE NOS HACE SER MEJORES
Nos hace sentirnos felicesporque ejercitamos nuestra libertad, porque son tiempos en los que elegimos qué hacer y esto nos da gran satisfacción. Todas las personas debemos tener la posibilidad de poner en práctica nuestra libertad y en esto juega un papel esencial nuestro tiempo libre, de ahí su nombre: libre.
Nos humaniza.En las actividades al aire libre podemos tener ocasiones de entrar en contacto con la naturaleza. Al contemplar un paisaje, al respirar el aire puro, al escuchar el ruido del agua de los ríos, de las olas del mar, de una cascada, al oler la hierba y las f ores aromáticas… nos encontramos personalmente con la naturaleza y esto nos humaniza. La naturaleza es un regalo para el hombre y una necesidad, por esto es fundamental que cuidemos el medio ambiente y enseñemos a todas las personas a cuidarlo.
Nos culturiza.Dedicarnos a hacer turismo es un método de aprendizaje eficacísimo porque es aprendizaje práctico, aquél que se aprende y no se olvida. A los jóvenes se les inculca desde el colegio el interés por la cultura a través de la programación de varias salidas culturales en cada curso escolar.
Desarrolla nuestra creatividad.Necesitamos tener nuestro espacio para ser personas creativas. Poner en práctica nuestra creatividad hace que muchas veces nos sorprendamos de nosotros mismos porque tenemos buenas ideas, ya sean escribir algún texto, dibujar algo nuevo o componer canciones.
Nos hace más sociables.Todos los momentos de ocio que compartimos con otros como hacer planes en familia, divertirnos con los amigos, conocer gente nueva y participar en juegos de grupo nos ayudan a salir de nuestro yo y a abrirnos al otro.
Empezar por conocer nuestrasaficiones.¿Qué me gusta hacer en mi tiempo libre? ¿Qué actividades de ocio realizo? Podemos escribir en un papel lo que solemos hacer y ver si descubrimos algo más que nos guste.
Tener en cuenta cuáles podemos hacer. De todo lo que nos gusta quedarnos sólo con lo que es realmente posible, de esta manera evitaremos sentirnos frustrados pensando: ¡Cómo echo de menos poder hacer tal cosa..!
Practicar la técnica del calendario. ¿Qué vas a hacer este f n de semana? ¿A dónde vais a ir este verano? ¿Algún plan para este puente? De la misma manera que programamos el trabajo de todo el año es muy conveniente que aprendamos a planificar nuestro tiempo libre para evitar que se nos vaya de las manos.
Saber descubrir momentos entre semana de tiempo libre y buscar actividades que nos ayuden a descansar. Por ejemplo el momento en que los hijos se van a la cama, aprovechar para hablar y pasarlo bien, ver alguna serie interesante o algún concurso.
Convencerse de que es fundamental contar con un tiempo para hacerdeporte:salir unos minutos a correr, ir a clase de paddle o tenis, jugar un partido.
Buscarinformaciónsobre planes de ocio. Consultar guías de ocio, ver las páginas web que hablan sobre qué hacer en cada ciudad, ojear revistas que contienen ideas para el tiempo libre, preguntar a nuestros amigos qué van a hacer y qué nos recomiendan.
Y siempre, tener en cuenta que los mejores momentos de nuestro tiempo libre serán aquellos que compartamos con los demás, con la familia y con los amigos.
¿CÓMO ENSEÑAR A LOS HIJOS?
Hay que empezar desde que son muy pequeños, no esperar a que lleguen a la etapa adolescente. Como todo en la vida, si antes aprenden algo, antes lo asimilan y lo incorporan a su vida.
Es necesario que los padres, dentro del programa de educación de sus hijos, preparen un plan de utilización del tiempo libre. Es un tiempo que está lleno de momentos muy provechosos para educar a los hijos envalorescomo la generosidad, el esfuerzo, la alegría, la paciencia. El mejor momento para formarles en este campo es en la edad temprana porque están muy abiertos a lo que los padres les presentan; y si esto les satisface, se están sentando las bases para que descubran por sí mismos el mejor modo de emplear los tiempos de ocio.
Enseñar con elejemplo.Los hijos se fijan de continuo en lo que hacen sus padres, por lo tanto se dan cuenta de si aprovechan o no el tiempo. Si observan que en su casa hay iniciativas, planes y ganas de pasarlo bien haciendo diferentes actividades juntos aprenderán a utilizar bien su tiempo libre más adelante. Por el contrario, en una casa en que el tiempo de ocio se reduce a dejar pasar el rato sin más, a descansar sin hacer nada distinto que ver la televisión, jugar a videojuegos o estar tumbados en el sofá, los hijos no tendrán ese aprendizaje.
Ayudar a los hijos a encontrar actividades que les diviertan, explicarles juegos nuevos y jugar con ellos. Proponerles formas de ocio que respondan a sus intereses y capacidades.
Respetar su tiempo. Es un error forzar a los hijos a hacer algo que no les gusta o no les interesa. Es su tiempo libre, no el de sus padres. Muchas veces son los padres los que deciden por los hijos, porque les viene mejor que hagan una actividad u otra o porque desean que sus hijos lleguen a ser buenos en algún campo artístico o deportivo.
A la hora de lasextraescolareshay que dejarles escoger teniendo en cuenta su edad así como las posibilidades económicas de la familia. Nosotros, sus padres, y su tutor les ayudaremos a tomar una decisión acertada pero debemos evitar siempre que hagan lo que nosotros queremos por encima de todo.
Evitar el estrés.Este punto es muy importante ya que hay muchos niños en la sociedad actual que sufren estrés como consecuencia del ritmo al que están sometidos durante la semana. Los padres deberían plantearse otro modo de organizar las tardes de sus hijos, como se hacía antes: el niño iba a casa después del colegio, dedicaba un tiempo a hacer los deberes y el resto a leer, jugar, hacer actividades que le entretenían. Esta manera de organizar hace que los niños puedan pasar la tarde sin estar sometidos a un horario estricto y sin tener que seguir una serie de órdenes, prolongando de esa manera su jornada escolar más allá de las ocho horas que pasan en el colegio.
Dar a los niñosespacio para equivocarse.La forma de educar en las tareas diarias que son de obligación, como hacer los deberes y mantener el orden en la habitación exigen de los padres un seguimiento más continuado o más persistente. En cambio, durante el tiempo libre la preocupación de los padres por el buen comportamiento de los hijos ha de ser diferente, se tratará de crear espacios en los que los niños puedan divertirse y sentirse más libres.
Los padres también tienen que ayudar a los hijos a desarrollar sucreatividadporque es una manera muy concreta de disfrutar del tiempo libre. Suelen estar acostumbrados a trabajar siguiendo muchas indicaciones y a veces les ocurre que no saben qué dibujar cuando se les dice haz un dibujo libre, o les cuesta mucho empezar a escribir cuando se les dice que inventen un cuento.
Hacer que disfruten con lalectura.Buscar libros que les puedan atraer y que sean adecuados para su edad, acompañarles a la biblioteca y enseñarles a elegir libros, teniendo siempre presente que sean adecuados a su edad y sirvan para su formación en valores. Un método que da muy buen resultado para que se animen a leer es que vean a sus padres hacerlo y disfrutar con ello. Hubo una temporada que, persiguiendo alcanzar este mismo objetivo se proyectó en la televisión un anuncio que mostraba una imagen de un padre y su hijo leyendo cada uno su libro, y el anuncio decía si tú lees, ellos leen.
Moderarlas actividades que consumen mucho tiempo o les llevan a aislarse (como sucede cuando se pasan horas frente al televisor o en internet). Seleccionar muy bien los programas, películas y juegos.
Compartirlas aficiones con los hijos. La clave está en que los padres se lo pasen igual de bien que sus hijos.
30 IDEAS PARA NO PERDER EL TIEMPO LIBRE
Tener hobbies:
• Leer novelas, libros de misterio, libros de historia, cuadernos de viaje, cómics…
• Realizar actividades artísticas como pintar, cantar, bailar, escribir poesía, tocar un instrumento…
• Escuchar música.
• Ir al cine y al teatro.
• Asistir a conciertos.
• Cocinar, decoración, hacer diseños de moda…
• Aprender un idioma.
• Hacer deporte: ciclismo, natación, correr, montar a caballo, jugar a tenis y paddel, esquiar, golf…
• Hacer colecciones de cromos, sellos, relojes, postales…
• Hacer un puzle, maquetas…
Hacer planes familiares:
• Ir de excursión: hacer senderismo, ir al monte, visitar una granja…
• Practicar algún deporte en familia, como ir a nadar, montar a caballo, jugar al tenis…
• Planes al aire libre como ir a pescar, ir a buscar setas, plantar, coger moras, andar en bicicleta, salir a patinar.
• Juegos de mesa, magia, manualidades.
• Hacer teatro.
• Organizar concursos.
• Hacer turismo: conocer pueblos, visitar museos, conocer monumentos históricos.
• Ver películas en casa y jugar juntos a la Wii.
• Participar en planes organizados por una asociación juvenil.
• Ir al cine.
Hacer planes con otras familias:
• Quedar para tomar el aperitivo.
• Organizar una comida o cena en casa de amigos.
• Ver películas y comentarlas.
• Visitar sitios de los alrededores.
• Practicar un deporte en grupo.
• Hacer concursos de cocina.
• Participar en actividades de voluntariado.
• Crear un grupo de música.
• Hacer excursiones.
• Pasar unos días de vacaciones juntos.
El tiempo de ocio es parte de nuestra vida y es importante saber cómo vivirlo. Sólo así podremos enseñar a los hijos a aprovecharlo y a disfrutar de él. Es tiempo de vivir, de experimentar e interiorizar. Es tiempo de alegría, de disfrutar de la vida, tiempo de felicidad, de gratuidad y de diversión.